domingo, 15 de noviembre de 2015

Queso Flor Valsequillo curado y Montes Alpha Carmenère 2013

El otro día vinieron unos amigos a cenar. Como aperitivos queríamos poner, entre otras cosas, un poco de queso. Pasamos por Alcampo y cogí una cuña de un queso que me pareció que tenía buena pimta. Un queso de cabra curado de Gran Canaria, el Flor Valsequillo. Fue un acierto, ya que ese queso fue una de las estrellas de la noche.

Se trata de un queso curado de leche cruda de cabra. Tiene un sabor muy intenso, así que no es un queso apropiado para hacerte un bocadillo, pero que en taquitos para un aperitivillo es excelente. La empresa tiene una sucursal en Yuncos, así que no sé si será fácil encontrarlo en la Península o aquí lo tenemos porque nos pilla cerca. En el Alcampo tienen la cuña a 13,42 €/kg.

El viernes volvimos a comprarlo. Lo empezamos como aperitivo en una cena en la que abrimos un vino que nos trajo una amiga de Chile. Se trataba de un Montes Alpha Carmenère 2013. La ficha técnica dice:

"Marcado y profundo color rojo carmín. Alto potencial aromático, con predominancia de frutos rojos y negros maduros, ciruelas al jugo, arándanos, cerezas maduras, confitura y leves notas de especias dulces. Un equilibrado aporte aromático lo ofrece el roble francés, notas tostadas de fondo y toques de café recién molido. En boca se muestra suave, de taninos redondos y buena estructura, además de presentarse muy amplio y persistente en boca".



A nosotros nos pareció un vino extraordinario. Lamentablemente, creo que tardaremos mucho en volver a verlo, así que lo vamos a dejar aquí para acordarnos de él.

domingo, 8 de noviembre de 2015

Pimientos rellenos de merluza y langostinos

Ingredientes (para 4 personas):
  • 16 pimientos del piquillo
  • 300 gr de merluza (puede ser otro pescado blanco, como pescadilla o bacalao)
  • 8 langostinos
  • Una cebolla
  • 5 cucharadas de tomate triturado
  • 2 cucharadas de harina
  • 80 ml de vino blanco
  • 80 ml de leche
  • Un diente de ajo
  • Una zanahoria
  • Perejil 
  • Laurel
  • Agua
  • Aceite de oliva 

Elaboración:

Lo primero es poner a cocer un poco el pescado para poder desmigarlo bien. Ponemos una olla con agua y una hoja de laurel. Cuando empiece a cocer echamos el pescado, un poco de perejil, un poco de cebolla, el diente de ajo y la zanahoria. Lo dejamos 5 minutos y lo colamos. Por un lado tendremos el caldo de pescado y las verduras, que usaremos para hacer la salsa y coceremos un poco más, y, por otro, el pescado ligeramente cocido.

Desmigamos el pescado. Pelamos los langostinos y los troceamos. Troceamos la cebolla y la sofreímos. Cuando empiece a estar dorada añadimos el pescado y los langostinos. Cuando empiecen a dorarse los langostinos añadimos la leche y una cucharada de harina y ligamos toda la mezcla.

Para hacer la salsa trituramos las verduras cocidas con 200 ml de caldo. En una sartén con aceite echamos el tomate triturado y dejamos que se haga un poco. Luego echamos el vino blanco y una cucharada de harina y dejamos que hierva un par de minutos. Después añadimos las verduras trituradas con el caldo y revolvemos hasta que tengamos una salsa espesa.

Con la mezcla de pescado y langostinos rellenamos los pimientos. Puede ser útil utilizar un guante de latex para agarrarlos mejor. Juntamos los pimientos rellenos con la salsa y lo dejamos cinco minutos a fuego suave. Echamos por encima un poco de perejil picado y servimos.

Un plato rico, muy aparente y no demasiado complicado:




Risotto con gambones y trigueros

Esta es una receta inspirada en una de Nicola Poltronieri para el Canal Cocina.

Ingredientes (para 2 personas):
  •  2 tacitas de arroz
  • 300 gramos de gambones
  • Un manojo pequeño de espárragos trigueros
  • 1 zanahoria
  • Media cebolla roja
  • 1 diente de ajo
  • Agua
  • Aceite de oliva
  • Sal
Elaboración:

Pelamos los gambones y separamos las colas de las cabezas y las cáscaras. En un cazo ponemos un chorrito de aceite y añadimos las cabezas y las cáscaras. Cuando empiecen a tomar color, echamos agua y dejamos cocer diez minutos. Lo colamos y ya tenemos el caldo para el risotto. Lo ponemos al punto de sal y lo mantenemos, al menos, templado, no me echéis caldo que acabáis de sacar del frigorífico.

Le quitamos a los espárragos la parte blanca. Troceamos las verduras y las colas de los gambones. En una sarten con aceite sofreímos el ajo, la cebolla y la zanahoria. Cuando empiecen a dorarse añadimos el arroz y lo rehogamos a fuego fuerte. Cuando el arroz comience a estar brillante echamos un poco de caldo y comenzamos a remover. Esta es la gracia del risotto: remover para que el arroz suelte almidón y se ligue. Según el arroz va absorviendo caldo debéis ir añadiéndole más. Cuando el arroz ya ha engordado pero sigue estando duro, añadimos los espárragos. Deberían quedarle unos quince minutos. Cuando el arroz ya esté casi hecho, 4 ó 5 minutos antes de retirarlo del fuego, añadimos las colas de los gambones troceadas. Continuamos removiendo un poco más y ya estaría. Dejadlo reposar un par de minutos y a comer mientras está calentito.



Como el risotto me hace sentir italiano y musical, voy a colgar un vídeo del grupo de una amiga de Dorami, la Beat and Beat Blues Soul Band, a los que estuvimos viendo ayer:


Bizcocho de mandarina

Hace un par de semanas tuvimos un día de la panadería: hicimos una empanada, una barrita de pan y, aprovechando que el horno estaba caliente, un bizcocho de mandarina.


Ingredientes:
  • 5 huevos
  • 1 yogur natural
  • 2 vasos (en toda la receta usaremos como medida el vaso del yogur) de harina
  • 2 vasos de azucar 
  • 1 vaso de aceite de girasol
  • 1 sobre de levadura
  • Rayadura de la piel de una mandarina
  • Un poco de mantequilla para engrasar el molde.
Elaboración:

Como véis es un bizcocho de yogur de toda la vida. Tradicionalmente se aromatiza con ralladura de limón, pero un día que lo estabamos haciendo no teníamos limón. Se nos ocurrió echarle  ralladura de mandarina y, a mi juicio, el resultado es mucho mejor.

Es muy fácil de hacer. Echamos todos los ingredientes (menos la manequilla) en el vaso de una batidora y los batimos bien. Engrasamos un molde con mantequilla, para que el bizcocho no se quede pegado y se desmolde fácilmente. Echamos la mezcla de ingredientes en el molde. Si os apetece, podéis echarle también trocitos de frutos secos cuando vertéis la mezcla. Metemos el bizcocho en el horno a unos 200 ºC. En una media horita debería estar. Para comprobar que esté perfectamente hecho podéis usar un palillo. Tenéis que esperar a que el bizcocho haya subido y tenga un tono dorado. Pincháis con el palillo el bizcocho y, si sale seco, ya está.

Cuando se enfríe un poco, desmoldáis el bizcocho y ya está.

Ésta es la empanada que hicimos:


Es una empanada asturiana de pollo, calabacín y queso, un relleno poco tradicional, la verdad, pero que es la que mejor nos queda. A ver si Dorami se anima un día a colgar la receta.

Iba a terminar aquí la entrada pero, como este blog ha estado también tradicionalmente ligado al rugby, aprovechando que ha sido recientemente el Mundial, voy a colgar también un vídeo resumen de la final: Nueva Zelanda-Australia.