martes, 17 de mayo de 2011

Arroz con leche

Este es el modo como hago yo el arroz con leche (algunas veces me sale mejor que otras; pero esto supongo que le pasará a todo el mundo…):


En una cazuela se pone un poquito de agua con sal. Cuando rompa a hervir se echa una tacina de arroz por persona. A continuación se añade una cucharada de mantequilla, dos tacinas de azucar (se puede añadir más si os gusta más dulce), una cucharada de anís, entre medio litro y tres cuartos de leche, un palo de canela y una rodajina de limón (con la piel). A partir de este momento, se empieza a revolver con una cuchara de palo y con mucha paciencia. Hay que controlar que no se quede seco y que el arroz no se quede duro. El plato está terminado cuando el grano de arroz está cocido. Es conveniente que se quede bastante líquido (por lo que si fuera necesario podría incorporarse más leche), pues según se vaya enfriando en la nevera siempre se secará un poquitín. A la hora de servir, se puede adornar con canela en polvo por encima (esto a gusto del consumidor).

sábado, 7 de mayo de 2011

Clasificación del vino por su crianza

Posiblemente este artículo debería haber ido después de otro relativo a la elaboración del vino, pero ya que Juan, en los comentarios de “El color del vino”, preguntó por las diferencias entre vinos jóvenes, crianzas, reservas… vamos a ponernos con ello. Para escribir este artículo me he basado fundamentalmente en la legislación española en la materia.

En primer lugar tendremos los vinos que no pasan por barrica o pasan muy brevemente. Según el Real Decreto 1127/2003, de 5 de septiembre, por el que se desarrolla el Reglamento (CE) n.º 753/2002 de la Comisión, de 29 de abril de 2002, que fija determinadas disposiciones de aplicación del Reglamento (CE) n.º 1493/1999 del Consejo, en lo que respecta a la designación, denominación, presentación y protección de determinados productos vitivinícolas, tendremos que:
  • Joven: es el vino obtenido en la misma campaña vitivinícola en la que se etiqueta.
Según la Ley 24/2003, de 10 de julio, de la Viña y del Vino, los vinos de calidad producidos en regiones determinadas pueden clasificarse en:
  • Crianza: para los tintos con un período mínimo de envejecimiento de 24 meses, de los que habrán permanecido al menos seis en barricas de madera de roble de capacidad máxima de 330 litros, y en botella el resto de dicho período, y para los blancos y rosados con un período mínimo de envejecimiento de 18 meses, de los que al menos seis habrán permanecido en barricas de madera de roble de la misma capacidad máxima.
  • Reserva: para los tintos con un período mínimo de envejecimiento de 36 meses, de los que habrán permanecido al menos 12 en barricas de madera de roble de capacidad máxima de 330 litros, y en botella el resto de dicho período, y para los blancos y rosados con un período mínimo de envejecimiento de 24 meses, de los que habrán permanecido al menos seis en barricas de madera de roble de la misma capacidad máxima, y en botella el resto de dicho período.
  • Gran reserva: para los tintos con un período mínimo de envejecimiento de 60 meses, de los que habrán permanecido al menos 18 en barricas de madera de roble de capacidad máxima de 330 litros, y en botella el resto de dicho período, y para los blancos y rosados con un período mínimo de envejecimiento de 48 meses, de los que habrán permanecido al menos seis en barricas de madera de roble de la misma capacidad máxima, y en botella el resto de dicho período.

Según esta misma Ley, los vinos de la tierra (y también los vinos de calidad producidos en regiones determinadas) pueden clasificarse en:
  • Noble: vinos sometidos a un período mínimo de envejecimiento de 18 meses en total, en recipiente de madera de roble de capacidad máxima de 600 litros o en botella.
  • Añejo: vinos sometidos a un período mínimo de envejecimiento de 24 meses en total, en recipiente de madera de roble de capacidad máxima de 600 litros o en botella.
  • Viejo: vinos sometidos a un período mínimo de envejecimiento de 36 meses, cuando este envejecimiento haya tenido un carácter marcadamente oxidativo debido a la acción de la luz, del oxígeno, del calor o del conjunto de estos factores.
La Ley 24/2007 admite que las clasificaciones que fija pueden ser alteradas por las denominaciones de origen. Así una denominación de origen puede aumentar los tiempos de envejecimiento del crianza, reserva o gran reserva para los vinos que pertenezcan a ella.

Por último voy a añadir otro par de definiciones, provenientes del Real Decreto 1127/2003, que pueden aplicarse a vinos con indicación geográfica:
  • Barrica: cuando se emplee o se haga referencia a este término, deberá indicarse en las informaciones relativas al vino en cuestión el período de tiempo, en meses o años, que ha permanecido en tales recipientes de madera, cuya capacidad máxima deberá ser de 600 litros. A pesar de lo anterior, podrá utilizarse la indicación “Fermentado en barrica” siempre que la fermentación del vino haya tenido lugar en los recipientes citados, sin que sea preciso indicar en este caso el período de tiempo de permanencia.
  • Roble: cuando se emplee o se haga referencia a este término, deberá indicarse en las informaciones relativas al vino en cuestión el período de tiempo, en meses o años, que ha permanecido en recipientes de madera de esa especie, cuya capacidad máxima deberá ser de 600 litros.
El artículo ha quedado un poco rollete, admitámoslo, pero, por lo menos, espero haber resuelto las dudas de Juan.

jueves, 5 de mayo de 2011

Emina Verdejo

Tenemos unos amigos, Raquel e Iván, que han tenido hace poco una niña. Cada vez que les decimos que vengan a casa a cenar, nos responden: “Mejor venid vosotros, que, con la niña, es mucho más cómodo”. Iván, además, es un cocinero excelente, viven al lado de casa y los dos son una compañía muy agradable, así que cuando este fin de semana se repitió esta conversación no nos hicimos mucho de rogar.

Como Iván está a dieta, no puede beber vino, y a su mujer no le gusta, así que llevamos una botella para Dorami y para mí. Estuve echando un vistazo en el Supercor y me decidí por un Emina Verdejo que salió a unos 3,50 euros. Estoy experimentando con vinos que están bien de precio y me apetecía dárselo a probar a Iván, que también sabe mucho de vinos (bueno, no puede beber, pero por una copita tampoco pasa nada).

Este vino es un Rueda de las bodegas Emina, de Medina del Campo, que pertenecen al Grupo Matarromera. Está hecho 100% con uva verdejo, una uva que ya sabéis que me gusta mucho, algo que comparto con Iván. A él le gustó la elección, ya que también le había echado el ojo a este vino y le apetecía probarlo.


Pasando al vino, según la información que aparece en la web de la bodega tendremos que:
  • En fase visual es amarillo, pálido con tonos verdosos, limpio y muy brillante.
  • En fase olfativa es franco (o sea, que no se le encuentran defectos), potente y muy afrutado, con expresivos primarios varietales de fruta fresca de la gama del albaricoque, plátano y piña, en perfecta armonía con florales de lavanda y violeta, toques anisados de hinojo propios de la variedad verdejo y tonos de heno y hierba fresca. Iván le sacó un olor a fruta tropical, mango o algo así, y yo me decanto por compartir su opinión.
  • En fase gustativa tiene buena estructura, con una punta de acidez que le da una notable frescura en perfecta armonía (demasiadas “perfectas armonías”, ¿no os parece?) con el alcohol que no destaca, con elegante sensación frutal y un típico amargor final propio de la variedad.
  • Maridaje con pescados blancos, quesos poco curados y carnes blancas. Nosotros lo tomamos con gambas a la plancha y emperador, así que tuvimos un maridaje de lo más feliz.
En resumen, un vino muy rico a un precio bastante majo. Mejor, en mi opinión, que el Adra Verdejo, del que hablamos hace unos días (aunque, claro, también es más caro) y que el Valpincia Verdejo, que también hemos probado en alguna ocasión y que tiene un precio similar.

domingo, 1 de mayo de 2011

Panga con champiñones

El jueves me llevé al trabajo panga con champiñones para comer. La panga es un pescado que ha aparecido recientemente en nuestras pescaderías y se ha convertido rápidamente en muy popular. Es un pescado blanco sin espinas, con una carne similar a la del lenguado pero más sabroso. Se vende en filetes y, normalmente, sin piel. Puede encontrarse tanto fresco como congelado.


Esta receta se puede preparar también con otros pescados blancos como la merluza y la pescadilla.

Ingredientes:
  • Filetes de panga
  • Champiñones
  • Pimiento verde
  • Pimiento rojo
  • Cebolla
  • Guindilla
  • Vino blanco
  • Perejil
  • Harina, aceite y sal

Elaboración:

Se pasan los filetes de panga por harina, se fríen y se reservan. En ese mismo aceite se echa pimiento verde, pimiento rojo, cebolla y un poco de guindilla (yo suelo echar una cayena). Cuando la cebolla empieza a dorarse echamos los champiñones cortados en láminas (los podéis comprar así o cortarlos vosotros). Una vez que los champiñones estén hechos quitamos la sartén del fuego, apartamos la verdura y añadimos el pescado. Cubrimos la panga con la verdura y añadimos un poco de vino blanco y perejil. Dejamos que haga “chup chup” unos minutos y ya está, listo para comer. Facilísimo, como veis.